lunes, 7 de febrero de 2011

"Primum vivere, deinde filosofare" *


Empecemos por la vida: anoche casi no dormí. Emoción: rabia. Mi cuerpo me olía a puta barata (¡el olor de la amiga de mi a-marido!)…
 Mi cerebro ha reaccionado muy bien y esta mañana me he despertado llena de vitalidad. Me he duchado con todo cuidado para recuperar mis olores y me he enfrentado con optimismo al nuevo día. Me he parado en la calle a oler unos jazmines y un poco más allá a contemplar unas rosas… ¡Ya puedo filosofar!


Primero fue el espejo, ¿hace ya más de un año?, conseguir desdoblarte frente al espejo para hablar contigo.
Has tenido el valor de mirarte muy dentro, bucear hasta el fondo, el valor de poner nombre a los hechos, a las acciones y a las cosas que has vivido, has sacado conclusiones sobre como allanar el camino futuro. Ahora sabes que tu perfume es de esperanza con incesantes toques de ilusión, un aroma profundo que tu sola has creado, pura alquimia inalcanzable para la mayoría.
Ahora un mundo nuevo, con diferentes reglas, se te viene encima. Procura seguirlas, no se deben despreciar. Tu vida cambia por tu propia decisión, poca gente consigue eso, dejarse llevar por la razón, y, no, no hablamos ahora de Kant, hablamos de ti.

"Quidquid latine dictum sit, altum viditur"**

¿A que suena bien? ¡Es la seducción de lo que no podemos descifrar!

* Primero vivir, después filosofar
** Cualquier cosa dicha en latín suena profunda  (traducción aproximada, no literal, que circula por internet)